Alex Morgan, Carli Lloyd, Megan Rapinoe, Becky Sauerbrunn y Hope Sole, jugadoras de la selección estadounidense de fútbol que ganó la última Copa del Mundo, acusaron a la federación nacional de discriminación salarial en una disputa radicada ante una comisión gubernamental.

Ellas argumentaron que les pagan casi cuatro veces menos que sus homólogos de la selección estadounidense masculina.

«Las cifras hablan por sí mismas», dijo Sole en un comunicado. «Somos las mejores del mundo, hemos ganado tres mundiales, cuatro campeonatos olímpicos, y a la selección de hombres le pagan más sólo por participar que a nosotras por ganar campeonatos».

El abogado Jeffrey Kessler, quien funge como uno de los defensores, dijo que la situación de la negociación del convenio laboral generó la necesidad de que las futbolistas actúen para frenar lo que consideran «el trato injusto y discriminatorio» que han experimentado durante años.

La federación emitió un comunicado en el que dice que no ha visto la querella y que no entraría en detalles, pero señaló estar «decepcionada» por la medida. (Fuente elgrafico.com)