Fue una tarde del domingo 8 de enero en la ya hoy desaparecida plaza de toros o redondel de Plaza González Víquez.

La corrida de toros tenía por menú la típica costumbre de abrir con una “monta” de toros y finalmente con la apertura de la plaza para el ingreso de los “toreros improvisados”; siendo ésta, el principal aperitivo de la corrida.

Resulta ser que a media tarde ya anunciaban otro toro con el torero en sus lomos, o sea una monta, pero ambos quedarían para la posteridad retratados por la cámara del gran fotógrafo de ese entonces Manuel Gómez Miralles.

El toro traía el número 88 y fue tanta fue la fuerza y la intensidad con que aquel toro azotó por los aires al montador de nombre desconocido en la actualidad, que sucedió lo inesperado.

De un momento a otro, y sin saber cómo, el toro al imprimir tanta violencia en sus movimientos por “safarse” del hombre que le ensartaba las espuelas hacia sus entrañas; lo expuso a la burla del público.

Lo cierto es que a medida que el montador clavaba sus espuelas en el animal, éste desató toda su fuerza, haciendo que el montador fuese arrojado por los aires; menos sus pantalones, los cuales quedaron sujetos al lomo de aquella fiera.

Los calzoncillos del montador tampoco resistieron la embestida y fueron destrozados, exponiendo toda su anatomía, momento que fue aprovechado por el destacado fotógrafo para dejarnos este recuerdo: el primer “culo al aire en una corrida a la tica”, ¡carajo!

Sementales ahí les dejo también el vídeo del “Pela Chanchos” que se dio muchos años después, la noche del 26 de diciembre de 2010 y en una corrida de Repretel.