Según un estudio publicado por el sitio de noticias Businness Insider, las personas que dicen cinco groserías por cada diez palabras tienden a tener un mayor IQ y una habilidad retórica más alta.

Este estudio fue presentado por Kristin L. Jaya y Timothy B. Jay, en una colaboración entre el Marist College y el Colegio de Artes Liberales de Massachusetts. Los autores argumentan que:

“Una creencia popular sobre la jerga coloquial menciona que las palabras que son un tabú son usadas porque las personas no pueden encontrar mejores palabras para expresarse y porque carecen de vocabulario (…) La fluidez es fluidez, independientemente de la materia, no hay razón para diferenciar el tamaño léxico, y al acceso de las palabras tabú como opuestas a las emocionalmente neutras”

También las personas con un lenguaje rico en groserías y maldiciones presentan tener un alto nivel de IQ, esto lo sugieren las pruebas realizadas para medir el nivel de coeficiente intelectual y relacionarlo con el léxico que utiliza una persona.

Un estudio de la Universidad de Minnesota sugiere que un escritorio desordenado es una señal de inteligencia; si no te tomas el tiempo para organizar tu espacio de trabajo, es porque tu mente está ocupada en cosas más importantes.

Usted, usted, usted que vive con un desastre a su alrededor, no es por exceso de desfachatez y holgazanería, como siempre te han dicho, por el contrario, es una muestra de que tiene la sabiduría del rey Salomón. (La Guía del Varón)