Este gran momento sucedió en la Johan Cruijff Arena de Amsterdam, donde las leyendas del thrash andaban volándole la cabeza a todos sus fanáticos holandeses, lo normal.

Cuando de repente vieron a un pequeño niño que les decía que quería tocar con ellos porque era su cumpleaños, y como no pudieron decirle que no, lo subieron sin pensarlo más.

El nombre del suertudo es Evan. Mientras subía, James Hetfield bromeaba con él. En el video que la propia banda compartió en su cuenta de Twitter, podemos escuchar a Hetfield diciendo: “¡Oh Dios, Lars se ha encogido! Lavaron a Lars, les dije que no lo pusieran en la secadora”.

Cuando ya estaba atrás de la batería, el propio Lars Ulrich le dio unos últimos consejos a Evan para que lo hiciera de maravilla.

¿Y cuál fue el resultado? Claro, una ejecución épica, mientras Ulrich se quedaba parado y solo pudo gritar “all right”. No les contamos más, vean este increíble video de Metallica y Evan.